En primer lugar, es importante entender que el sistema cardiovascular es un circuito cerrado, compuesto por el corazón y los vasos sanguíneos. El corazón bombea la sangre y los vasos sanguíneos son los conductos que la transportan por todo el cuerpo.
Cuando hay una disminución de la presión arterial, como en el caso de la hipotensión, el cuerpo responde liberando sustancias vasoactivas, como la adrenalina, noradrenalina y vasopresina. Estas sustancias actúan sobre los vasos sanguíneos para aumentar su tono, lo que resulta en una constricción de los vasos sanguíneos y un aumento de la presión arterial.